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martes, 21 de diciembre de 2010

Habitación en Roma

Y todo empieza en una habitación, un espacio que sería de lo más cotidiano si no fuera porque está en un emplazamiento muy tipificado en lo romántico: Roma y su coliseo, pero es irrelevante el espacio en el que se desarrolla la acción, son relevantes sus usuarias: dos perfectas desconocidas que quedan prendidas a primera vista en un bar y deciden pasar la noche juntas.
Una sabe de que va la cosa, y la otra es la primera vez que le sucede y prueba suerte, pero se encuentran con un tercer personaje inesperado por ambas: el amor, que hace acto de presencia en un fresco de Cupido y en sus corazones, haciéndoles desear que esas horas de acogedora oscuridad no acaben nunca, planteándose vivir en ese eterno presente y dejarlo todo atrás, y transmitiendo al espectador la sensación, la necesidad, de tener una noche así, una noche en la que nada importa más que la persona que tienes al lado y lo que te transmita.
Y así sin darte cuenta conoces a ambos personajes en apenas hora y media de una manera muy intensa, aunque realmente no tienes ni la certeza de saber sus nombres, sólo datos biográficos y el inmenso amor que se puede llegar a sentir incluso en tan breve espacio de tiempo.
En fin, que os recomiendo encarecidamente que la veáis, y venzáis a los posibles prejuicios, y sobre todo que la disfrutéis y reflexionéis acerca de ella, y su 'aplicación' a la vida diaria.

2 comentarios:

  1. Yo esta peli la vi y me gustaron más las escenas de diálaogo entre ambas, el conocer un poco de sus vidas, su forma de pensar, sentir más que las escenas lujuriosas.

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  2. Es que la película es buena por eso, porque te enseña a conocer dejando a un lado lo carnal, dejando claro que lo importante es la relación emocional entre ambas y no la física.

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